martes, 29 de septiembre de 2015

CRÍTICA TEATRAL DE LA OBRA AURORAS– Dir. Susana Hornos y Zaida Rico




“Yo conocí aquel hombre y cuando pude,
cuando ya tuve ojos en la cara
cuando ya tuve la voz en la boca
lo busqué entre las tumbas y le dije
apretándole un brazo que aún no era polvo:
todos se irán, tú quedarás viviente.”
Pablo Neruda. El pueblo.

Las agujas se disparan como saetas en esa mañana calurosa. Los niños juegan por derecho eterno. La siega en los campos del trigo se interrumpe por una brisa lejana. Un abedul llorón bosqueja una angustiante mirada mientras las campanas de los pueblos crepitan. Los minutos serán piedras que llevan esos campesinos y obreros españoles en un día que corona el calendario infame.

El falangismo despliega su maquinaria de terror sobre la Segunda República Española. Algunos predicadores del bien común permanecen impávidos, otros acuden a Dios…otros festejan el nuevo “orden”. El miedo hace del orgulloso semblante de las madres una meditación  profunda…una infancia desgarrada se avienta.     

Auroras se compone de tres historias donde el globo gira, grisáceo, en torno a estos niños. El rumbo de ellos es incierto. Algunos son exiliados en Sudamérica. Otros tienen la confusa suerte de llegar a la Unión Soviética. Son relatos en los cuales la  vida se impone frente al desfallecer de la libertad como un capítulo maniqueo, donde manos estrechas atiborradas de cartas evaden a los representantes de la persecución feroz. Los padres, los hijos, los abuelos, los hermanos, los amantes, los filántropos,  los compañeros…todos sometidos a elegir el destino.

Estos niños diletantes, prístinos, son expulsados del paraíso sin siquiera entender las razones.  Muchos de sus padres han accedido al conocimiento de las miserias humanas y no se han congraciado con el silencio. Una señal llega desde tierras lejanas.  En las costas aguardan las madres esquivando los óbitos. Otros vuelven raudos desde los puntos recónditos del globo, con los brazos arremangados y una firme decisión de abultar las filas del bando republicano.

Este mar del que su maestra les habla es la expectativa…un sueño que hará de reducto de escape, alojando críos y plegarias escondidas en los montes.  Para ellos, nacer bajo nuevo signo desde la panza de un buque significa la vida.

La obra de estreno que completa la Trilogía Republicana  es una pieza única…sublime. No sólo por su maravilloso elenco y su trama. Todo es una unidad armónica. La fantasía irrumpe con un sentido tan delicado de estas infancias que nos emociona, aún situados frente a un retrato tan terrible como significa la guerra civil.

El desarraigo implica un camino en la nueva tierra. Cada paso inaugural encadena un pasado desmantelado…puesto en ese escaso equipaje. La otra orilla prepara el violín y la guitarra. 
Quizás el exilio abrace el olvido y el recuerdo.

Auroras se despide de los teatros porteños este Martes 29 de Septiembre 20:30 hs en el Teatro Margarita Xirgu, Chacabuco 875 CABA.  

Ficha técnica:

Elenco:

Clara Díaz
Susana Hornos
Maday Méndez,
Ana Noguera
Zaida Rico

Vestuario y escenografía: Valentina Bari, Néstor Burgos, Alejandro Mateo y Daniela Taiana/ Iluminación: Mariano Arrigoni, Omar Possemato y Nacho Riveros/ Caracterización: Néstor Burgos y Ana Noguera/ Música: Mariano Cossa y Gonzalo Morales/ Asesoramiento en coreografía: Antonio Luppi/ Asesoramiento en percusión: Carmen Mesa/ Fotografía: Akira Patiño/ Diseño gráfico: Silvia Barona y Sergio Calvo/ Producción Ejecutiva: Silvia Barona/ Producción general: Trinchera Teatral/ Dramaturgia y Dirección: Susana Hornos y Zaida Rico.
Crítica: Guido Ignacio Facile


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