LLTV: Los tres libros más importantes que hayas
leído o que mayormente te constituyeron como persona.
GD: 1984 de
Orwell, El Extranjero de Camus y La insoportable levedad del ser de
Kundera. Son tres libros que pasaron de ser un deber académico a los más valiosos
consejos literarios que me dio mi profesora de lengua de la secundaria. Fueron
el origen de mi amor por la lectura, y más aún por un tipo de lectura con
ingredientes característicos: monólogo interior, espíritu crítico y angustia
existencial.
LLTV: ¿Último libro que leíste?
GD: Novecento de
Alessandro Baricco, también conocido como La
leyenda del pianista en el océano. Es un libro que me obsequiaron hace
tiempo y que guardé, casi proféticamente, sabiendo que en algún momento iba a
estar cantando a bordo de un crucero. La profecía se cumplió y lo terminé
leyendo en el avión que me llevó a España para tomar el barco.
LLTV: ¿Qué
libro te marcó algo para siempre y por qué?
GD: Es una pregunta perversa. Pero podría decir que El Lobo Estepario fue el primer libro –digamos seriamente- que leí
en mi adolescencia por elección propia. No hubo recomendaciones, ni
obligaciones. Sólo una biblioteca y este libro allí como uno más. Recuerdo que
me llamó la atención el título. Y también recuerdo que el clic mental se generó
con la siguiente frase: “¿Cómo no había yo de ser un lobo estepario y un pobre
anacoreta en medio de un mundo, ninguno de cuyos fines comparto, ninguno de
cuyos placeres me llama la atención?”. Supongo
que varios adolescentes nihilistas habrán tenido su epifanía a raíz de esa
frase, pero puedo asegurar que ese nihilismo se transformó en una repentina fe
en la humanidad: me sentí por primera vez identificada con un personaje, con un
autor, de otro tiempo y lugar, pero un ser humano al fin. Así de trágicos somos
de jóvenes…
LLTV: ¿En qué circunstancias escribís?
GD: Con la presión de un show cerca. Es mi excusa para poner la inspiración
a punta de arma. Previamente habiendo recibido algún boceto armónico y/o
melódico de parte de mi compañero compositivo Pablo Carmona. Asimismo puedo
decir que en las horas paradójicamente estáticas que uno puede pasar en el
transporte público he llegado a escribir mis canciones preferidas.
LLTV: ¿A qué personaje de qué libro invitarías a
tomar un café para conocerlo más profundamente, y por qué?
GD: Seguramente al troglodita Homero de Borges en
El Inmortal. Un café con él y la muerte ya no es un problema.
LLTV: ¿A qué personaje de qué libro te hubiera
gustado representar?
GD: Me atrae
la idea de ser el protagonista de un cuento de Woody Allen llamado El
experimento del profesor Kuglemass. Este sujeto viaja en el tiempo a través de
un armario y tiene encuentros y affaires con distintos personajes de la
literatura.
LLTV: ¿A
qué personaje de qué libro invitarías a comer en tu casa dispuesta a divertirte
y pasar un buen momento, y por qué?
GD: Quizás
le pediría a Holly Golightly de Desayuno en Tifanny’s que venga con su gato
naranja a casa. O mejor aún, que organice una fiesta con todos sus amigos snobs.
LLTV:
¿Recordás qué libro te generó muchísima expectativa y te defraudó en la misma o
mayor proporción?
GD: Más que expectativa fue una
obligación moral lo que me llevó a leer Crimen
y Castigo y sentir que fue el libro que más me costó terminar. La longitud
tampoco ayudó…
LLTV: ¿Tenes escritores que puedan llamarse
referentes para vos?
GD: En este momento Sartre, no sólo como escritor,
sino como pensador, casi diría como estilo de vida.
LLTV: ¿Qué cosa es lo que más te sorprende de la
humanidad?
GD: A pesar de mi escepticismo, y de que
evidentemente va a sonar a frase hecha, me sorprende que nunca deja de
sorprenderme, tanto para mal como para bien.
LLTV: Este
viernes 18 de marzo a la medianoche te presentas en Av. Callao 966, CABA. ¿Será
un show bastante literario, además de musical?
GD: Como
siempre la propuesta es presentar nuestros temas originales intercalados con
algunos standards de jazz, blues y soul.
GD: Un blues sobre el poema Lo
Fatal de Rubén Darío, un boggie sobre el mito de Sísifo, un twist sobre el
pulóver azul de Cortázar, un rock sobre La Metamorfosis y varias
canciones sartreanas.
LLTV: ¿Qué nos podés adelantar del repertorio?
GD: Además
de lo mencionado habrá una canción estreno sobre las formas que adoptaba Zeus
para ir tras su amantes. Y si la inspiración se pone concreta seguramente
tendremos finalizado otro tema sobre el libro La edad de la razón, de Sartre.
LLTV: A propósito tenés un tema propio que se
llama “La Náusea ”
en homenaje a Sartre. Hay muchos homenajes en la música que hacés. Mucho
material existencialista. Sos consciente que no es lo común escuchar, Jazz
literario podríamos decir.
GD: Sí, así como soy consciente
de que me estoy metiendo en un terreno que podría clasificarse como el
paroxismo de lo anticomercial. Gran parte de las canciones de la historia
universal surgen de un amor, y si es frustrado tanto mejor. En mi caso el motor
está en libros que me marcaron y dejaron un legado un tanto más interesante que
algún ex novio que haya tenido.
LLTV: Hace muy poco cantaste acompañada en el
escenario por Robin Banerjee, guitarrista de Amy Winehouse. ¿Que sensación te
dejó esa experiencia?
GD: Robin es un artista inmenso
y una gran persona. Tiene un oído excelente para fusionarse con cantantes. En
cuanto empezamos a tocar ensamblamos perfectamente y todos sus aportes fueron
realmente muy enriquecedores.
LLTV: ¿Cuáles son los proyectos para este 2016?
GD: Grabar un disco con todas las canciones originales
que nacieron en estos últimos dos años. Viajar. Seguir leyendo, mucho.
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